Factores como el aumento del precio del combustible (equiparando en ocasiones el coste del diésel al de la gasolina) o las políticas medioambientales en las ciudades han colocado en el punto de debate la diferencia entre los vehículos diésel y los de gasolina.
En algunas ocasiones, el tipo de combustible condiciona el precio del seguro al que pueden acceder los conductores. Los aspectos que influyen en esto son muy variados: fiabilidad del motor, número de kilómetros que realiza el conductor, cantidad de sistemas electrónicos, grado de contaminación, etc. En Mejores Seguros Online podrás conocer los seguros de automóvil y las coberturas a todo riesgo que se adaptan a todo tipo de conducción.
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¿Qué es mejor Diésel o Gasolina?
Vehículos de gasolina
Los factores para decantarse por un vehículo de gasolina suelen ser el kilometraje (el consumo de gasolina es bastante eficiente con pocos kilómetros de conducción) y la fiabilidad que ofrece su motor, sobre todo a altas revoluciones.
Ventajas de los vehículos de gasolina
La gasolina tiende a ser más económica que el diésel y el consumo del coche es algo más bajo. Los vehículos de gasolina suelen ser de gama media y baja, por lo que son más económicos.
Los motores de estos coches son más silenciosos que los de diésel y la potencia es mayor al subir las revoluciones. Esto tiene un impacto en los seguros de automóviles. Algunas aseguradoras consideran importante el aspecto del motor relacionado con la fiabilidad. Los vehículos de gasolina son más fiables puesto que el motor es más sencillo y se reducen las averías con este componente y sus piezas relacionadas. Las aseguradoras ofrecen mejores coberturas de seguros a todo riesgo a un menor precio.
Este tipo de vehículos solían ser altamente contaminantes hace unos pocos años, pero las emisiones de CO2 se han reducido considerablemente en los coches más modernos. Muchos modelos de nueva fabricación integran de fábrica filtros en el tubo de escape que reducen la contaminación expulsada. Con esto, los coches cumplen con los estándares dictados por la Unión Europea a partir de 2030 (los coches de nueva fabricación deben contaminar un 55% menos de los límites actuales).
Desventajas de los vehículos de gasolina
La principal desventaja de estos vehículos es el elevado consumo de combustible, sobre todo en los coches pesados o que son usados para tirar de remolques o caravanas.
Por otro lado, el motor no es recomendable para una conducción demasiado exigente en el entorno urbano, en parte porque el consumo de energía es más elevado que en los vehículos de gasolina.
Este tipo de combustible es fácilmente incendiable, un aspecto que las aseguradoras tienen en cuenta a la hora de tramitar sus pólizas, así como seguros de daños o patrimoniales. Aún así, los seguros de automóviles para vehículos de gasolina suelen ser más económicos que los de diésel.
La contaminación es un problema de los vehículos propulsados con gasolina, por lo que la mayoría de modelos más modernos empiezan a integrar un filtro de partículas. Esto se debe al auge de las normativas que restringen la circulación de vehículos contaminantes en los núcleos urbanos.
Vehículos de diésel
Los vehículos diésel se venden bastante bien en el mercado automovilístico debido a la eficiencia de consumo de su motor y las bajas emisiones contaminantes. Además, la fiabilidad de este motor diésel es alta en vehículos pesados, algo que no sucedía con los vehículos de gasolina.
Ventajas de los vehículos de diésel
Entre las ventajas de conducir un vehículo diésel encontramos el menor consumo de combustible debido a la alta eficiencia de su motor. A su vez, los vehículos de diésel son menos contaminantes que los de gasolina, por lo que pueden sortear mejor las restricciones en los núcleos urbanos.
En cuanto al motor, ofrece mayores posibilidades que los vehículos de gasolina: tiene un buen desempeño en automóviles pesados como SUV (modelo cada vez más demandado en el mercado automovilístico) y todoterrenos 4×4. Se puede decir que el motor se adapta bastante bien a todo tipo de superficies y permite realizar largos trayectos con una mayor fiabilidad. Otro aspecto relevante de los vehículos diésel es la idoneidad para remolcar cierto peso.
Desventajas de los vehículos de diésel
Los vehículos diésel tienen un motor potente, aunque su potencia en revoluciones por minuto es más baja cuanto más suben las rpm. Además, el motor diésel, sobre todo en los modelos de 3 y 4 cilindros, suele producir pequeños sonidos y vibraciones.
Este tipo de combustible es algo desagradable a la hora de repostar debido a su fuerte olor y las dificultades para eliminar las manchas en caso de que se produjeran. El diésel es un líquido muy aceitoso que se derrama con facilidad, por lo que los conductores deben tener cuidado al llenar el tanque del depósito.
El precio del diésel suele ser algo más bajo que el de la gasolina, aunque debido al aumento generalizado de los precios del combustible, estas dos alternativas suelen ofrecer pocas diferencias.
En cuanto a la contaminación ambiental, los vehículos diésel son más eficientes y cuentan con filtros que reducen la producción de CO2 y NOx. Esto implica que las restricciones en las ciudades debido a la polución sean menores.
Los seguros de automóvil para los vehículos de gasolina cubren aspectos como los daños o patrimoniales y la tramitación de un parte amistoso de accidente. Se puede decir que ofrecen coberturas de seguros a todo riesgo muy competitivas dentro de su segmento de mercado.
La desventaja de este tipo de vehículos es la complejidad de sus sistemas (cada vez son más modernos y suelen tener pequeños fallos técnicos). Esto se traduce en la contratación de seguros: la mayoría de los seguros de los vehículos de diésel suelen ser ligeramente más elevados que los de los vehículos de gasolina debido a la menor fiabilidad de los sistemas electrónicos. El motor de estos vehículos sí que suele ser fiable y ofrece un alto rendimiento para coches pesados, incluso utilizando el automóvil como remolque.
¿En qué se parecen los seguros de vehículos diésel y gasolina?
Los conductores de vehículos, ya sean diésel o gasolina, pagan primas similares en cuanto a factores externos al combustible del vehículo: perfil del conductor, historial al volante, antigüedad del carnet, año de la primera matriculación del vehículo, equipamiento o potencia del motor.
Por ejemplo, los conductores menores de 25 años suelen pagar primas elevadas puesto que en esta franja se concentra un número elevado de accidentes, así como las profesiones con mayor número de desplazamientos o con altos niveles de estrés. Estos factores de riesgo se añaden al precio base de la prima del seguro del vehículo, con la posibilidad de aumentarlo o reducirlo en base al tipo de combustible.
Los seguros de los vehículos evitan cubrir daños físicos o materiales derivados de la imprudencia del conductor, por ejemplo, conducir bajo el efecto del alcohol o las drogas, distracciones provocadas por animales dentro del vehículo o circular sin cinturón de seguridad.
Algunos conductores se preguntan si se puede conducir con chanclas. Lo cierto es que no hay restricciones específicas para este tipo de calzado, aunque la ley expresa que el conductor debe manejar el vehículo con un calzado cerrado, cómodo y con suelas antideslizantes.
No es extraño que algunas aseguradoras no quieran cubrir accidentes en vehículos de diésel o gasolina que se han producido por la conducción en chanclas. Esto puede causar que el pie resbale peligrosamente y sea complicado realizar una frenada de emergencia o que la sensibilidad del pie con el pedal no sea la adecuada. ¿En qué se diferencian los seguros de vehículos diésel y gasolina?
Los coches con una potencia elevada (mayores caballos) suelen tener una prima superior debido a que las estadísticas muestran que tienen mayor probabilidad de accidente. El peso y la potencia también son relevantes en este sentido.
Los vehículos diésel suelen ser más pesados y la potencia de su motor es mayor, por lo que la incidencia tiende a ser más elevada. En cambio, algunos vehículos de gasolina tienen un carácter deportivo: el precio de la prima del seguro del coche aumenta en estos casos.
La prima del seguro de los vehículos de gasolina suele ser, por lo general, más baja porque la fiabilidad del motor de estos coches y de sus componentes electrónicos es mayor. Los vehículos diésel tienen un precio del seguro algo más elevado debido a la mayor potencia de caballos de su motor (mayor riesgo de accidente por subir en exceso las revoluciones del coche) y la tendencia de los conductores a realizar largos trayectos con una conducción más exigente.
Los coches de diésel se presentan como una alternativa sostenible, aunque los vehículos de gasolina siguen ofreciendo una alta fiabilidad y cada vez integran filtros más efectivos en la reducción de la contaminación. En conclusión, las características de cada automóvil tienen que ver con el modo de conducción del usuario, así que el seguro se debe adaptar a estas necesidades.
